1. Limpieza de la uña
Para conseguir una manicura de larga duración, hay que hacer las cosas bien desde el principio. Lo primero es eliminar toda la suciedad, residuos grasos y por supuesto posibles restos de laca de ocasiones anteriores. Para ello nada tan efectivo como utilizar un algodón con quitaesmalte y después lavar las manos con agua y jabón para que no queden restos.
2. Hidratación
Uno de los pasos básicos y generalmente menospreciados es la hidratación. Conviene aplicar un aceite especifico para uñas y cutículas y dejarlo actuar durante unos minutos. Durante ese tiempo puedes aprovechar para limar las uñas. Recuerda lavarte las manos al finalizar.
Para limar la uña correctamente, es importante empezar por el borde libre y luego por los laterales, limando en una sola dirección y puliendo la uña para cerrar el poro que se ha abierto con la lima. Con esto conseguiremos que se rompa la uña o salte el esmalte.
En nuestra sección de Aceites de Cutículas encontrarás aceites con agradables fragancias.
3 aromas distintos para hidratar tus uñas.
3. Esmalte base
Ahora es el momento de la aplicación de un esmalte base o prebase, para que el color se fije mejor y para aplicar el tratamiento específico, en caso de que se necesite: calcio, endurecedor, alisado etc. Si sufres de uñas blandas, es importante aplicar un esmalte endurecedor con el fin de que la uña no se doble y no salte el esmalte. En este tipo de casos se puede usar una combinación de dos bases como una capa esmalte base y encima otra capa de endurecedor, para una dureza mayor.
4. Aplica dos capas de color
Es importante prestar atención y aplicar el esmalte de la manera correcta. Tienes que empezar por la parte de la raíz, desde el centro de la uña hasta la punta y después por la parte de los laterales. Hay que evitar pasar varias veces por la misma zona. Es mejor aplicar una capa fina y repetir el proceso una vez que tengas la primera capa seca. De esta manera el esmaltado se mantendrá flexible y evitaras que salte el esmalte por culpa de un pequeño golpe. Como consejo, es recomendable pasar el pincel por el borde de la uña, de esta manera conseguirás sellarlo y crear una cobertura perfecta.
5. Protector
El protector o top coat es una última capa que protegerá el color y hará que el esmalte dure más tiempo, además de darle brillo y resaltar los colores. Recuerda cubrir el borde.
Hay protectores que aplican una fina capa de brillo o tonalidad a tus uñas, consiguiendo un bonito acabado.
Una de las novedades son los protectores con acabado mate. En lugar de dar brillo, dan un acabado mate muy sutil.
Decoración de uñas realizada con el sistema de estampado de uñas Konad y finalizada con el protector mate Konad.